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Cuando realmente non puedes ya ni con el alma , sabes y comprendes que ya no puedes más , que esa fue la diminuta gota que colmó tu paciencia , tu caracter y sobre todo tu tempestad.
Cuando esto pasa no piensas  lo necesario que es un buen abrazo y llorar llorar, porque sigues tan diminuta como el día anterior ,e incluso tan dévil como cuando eras un niño en los brazos de tu madre.

A veces es difícil ver la realidad que está delante de tus ojos , perdiendo  la calma para buscarla y anelando no conocerla , pero sin duda lo peor es creer llegar al cielo con tu  verdad cinguida a ti  misma ,con la esperanza en lo alto de tus más importantes cuestiones y ver como todo eso cae en picado por la pendiente del destino que con sus largas fauces enrebusca el presente entorpeciendo bruscamente los sueños y esperanzas del futuro...

Tal vez un día consiga ver a mi  propia sombra superior a tu sombra ,incluso a mi propio cuerpo...
 nunca llegará  ese día yo lo digo ahora mismo , me rindo ante tu presencia grandisimo rey de los versos y las rimas yo me rindo , lo  digo alto ...
No se volverán oir rimas con mi nombre , ni versos, ni estrofas, sólo quedarán en mi memoria la memoriable batalla vencida por ti caballero , señor, y culpable de todas mis amarguras.